• Alimento de los dioses

    El amaranto data en el continente desde hace aproximadamente unos 7 mil años; era considerado una planta sagrada de los dioses en las diferentes culturas indígenas y llego a ser objeto de prohibición por los conquistadores europeos, los cuales expresaban su desacuerdo debido a la utilización de este alimento en rituales considerados paganos.
    La expresión de “me importa un bledo” basa su origen en el sentir de los españoles hacia este alimento; donde tanto su consumo, como su cultivo, llegaron a ser abolidos pese a connotaciones religiosas. En pasadas ediciones del diccionario de la RAE (Real Academia de la Lengua Española) bledo, gozaba del siguiente significado: “planta anual comestible de la familia de las quenopodiáceas; cosa insignificante, de poco o ningún valor”.
             Durante el período prehispánico post clásico, es decir, la época colonial, se prendió fuego a las plantaciones de amaranto y en otros casos los campos de cultivo fueron señalados con letreros que rotulaban “alimento para salvajes”. Para el pensamiento europeo, cualquier alimento que no estuviese mencionado en Biblia, era execrado para evitar su consumo.
    En la actualidad, el amaranto, al igual que la quinua, se encuentra en una creciente popularidad debido al descubrimiento de sus propiedades alimenticias. Su cultivo se ha centrado normalmente en países del continente americano; tales como, México, Perú y Bolivia; sin embargo, países como Estados Unidos, China e Indian,  han mostrado un repentino interés por el uso de notable y noble alimento. En noticias más recientes la NASA (Nacional Aeronautics and Space Administration), seleccionó al amaranto como producto nutricional idóneo para los astronautas, gracias a su excelentes propiedades nutritivas, bajo peso molecular y fácil digestión.

    Amaranto-propiedades
    El amaranto; así como la quinua, han sido considerados por algunos como un cereal; sin embargo, en botánica, es clasificado dentro de la familia de las quenopodiáceas, donde se encuentran especies como la espinaca, la remolacha, la acelga, etc. Las hojas de esta planta también pueden ser objeto de consumo, pero lo que ha despertado el mayor interés han sido las semillas por su valor nutricional.
    El grano de amaranto es de un tamaño muy pequeño, pero en gran contraste con su aporte proteico el cual está libre de gluten y colesterol. Su consumo es recomendado en deportistas, niños, ancianos, veganos y otros. El contenido proteico de este vegetal está entre 14 y 18%, con presencia de aminoácidos esenciales como la lisina y metionina; la cual interviene en el desarrollo de células del cerebro, además de estimular el crecimiento. Estudios confirman su participación en el desarrollo cognitivo como la memoria, la inteligencia y el aprendizaje del individuo y gracias a la ausencia de gluten es ideal para paciente celíacos, diabéticos y personas autistas. Entre otros compuestos, el amaranto posee también vitamina A, B, C y E; es recomendado para regímenes hipocalóricos y puede ser consumida en presencia de otros cereales para elevar la calidad nutricional de estos.

    Usos del amaranto
    Del amaranto se puede aprovechar tanto la planta como el grano, puede ser favorable su consumo en personas con anemia y desnutrición gracias a su alto contenido de hierro; es también recomendable su ingesta en pacientes con osteoporosis debido a su contenido de calcio y magnesio. Entre otras aplicaciones, puede ser sintetizada para la elaboración de cosméticos, colorantes y  resinas plásticas biodegradables entre otros. Expertos recomiendan hervir el amaranto, en caso de ser consumido como verdura por contener oxalatos y nitratos.
             En un abanico de opciones, al ser consumido tostado, la semilla se comporta igual que el pisingallo; es decir, que sufla igual que las cotufas (palomitas de maíz); se puede moler o pulverizar para elaborar harina o sémola, con la posibilidad de combinar junto con otros granos como el trigo para equilibrar la presencia de gluten en la elaboración de panes, si fuese el caso. La imaginación, en el campo gastronómico, es el límite.

    Valor nutricional y composición química
             Por cada 100 gr de amaranto hay unas 316 calorías, de 15 a 18% de proteínas, de 50 a 60% de carbohidratos y entre un 5 a 8% de grasas saludables; además de los micronutrientes ya mencionados como el hierro, calcio, magnesio, vitaminas A, B, C,y E.

    Beneficios del amaranto
    Los nutricionistas recomiendan su consumo de amaranto por sus beneficios a la salud; disminuye el colesterol, fortalece huesos, ayuda a controlar el azúcar y es de fácil digestión. La Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos, realizó un estudio en 1975, donde clasificó al amaranto como “El mejor alimento de origen vegetal para consumo humano”.









  • You might also like

    No hay comentarios.:

    Publicar un comentario